Cuando París era el centro del mundo, aquellos años en que Londres vivió sin querer la revolución de las costumbres, los días en que Madrid salió de su pacatería para adentrarse en la era moderna, la Lima que acogió a las chilenitas que quitaron el sentido a Ricardo Somocurcio, ese niño tan bueno... Son ciudades en las que transcurre Travesuras de la niña mala (Alfaguara), la última novela de Mario Vargas Llosa.
"Los escritores estamos obligados a contar los muertos y a sacarlos uno a uno de las masas de personas enterradas que no tienen nombre", afirmó ayer Günter Grass en la apertura del 72º Congreso del PEN Internacional en Berlín. El encuentro reúne en la ciudad a 450 autores de todo el mundo hasta el próximo domingo.
Dos notables películas han mejorado el nivel medio de la competición, donde hasta ahora sólo unos pocos títulos habían concitado el interés general. Babel, del mexicano Alejandro González Iñárritu, fue recibida con entusiasmo por parte de buena parte de la prensa, mientras que la francesa Flanders, del realizador Bruno Dumont, irritó y fascinó a partes iguales.
Cine en español
DIEGO GALÁN
EL PAÍS presenta mañana, jueves, por 2,95 euros, la adaptación de la novela de Fernando Vallejo, y el viernes, por 5,95 euros, el segundo filme en solitario de Cesc Gay