El presidente del Athletic confirmó ayer a Javier Clemente como entrenador para la próxima temporada "porque es el mejor entrenador posible para el Athletic", dijo con solemnidad, y arremetió contra la anterior Junta Directiva, presidida por Javier Uría, hasta su fallecimiento, y por Ignacio Ugartetxe, después.
Lamikiz aseguró que Javier Clemente es un entrenador que "ha demostrado su cariño al Athletic, sobre todo en la negociación cuando hubo que sustituir a José Luis Mendilibar" [en la jornada 10ª]. Lamikiz aseguró que se le habían ofrecido "muchos entrenadores, algunos muy mediáticos", pero que no habían establecido contacto con ninguno de ellos. "No hemos tenido ninguna duda a la hora de elegir a Clemente", aseguró Lamikiz, aunque durante las últimas semanas se han conocido divergencias internas en la Junta directiva. Lamikiz aseguró también desconocer cualquier divergencia en el vestuario con la continuidad de Clemente y anunció, como único proyecto de futuro, el trabajo en grupo en Lezama "de forma que el primer equipo no sea una celda aislada únicamente guiada por el entrenador sino en la que participen el resto de estamentos deportivos y médicos del club".
A eso se redujo el proyecto de futuro del actual presidente que utilizó más de media hora en acusar de los males del Athletic a la anterior Junta Directiva. Fue un deja vu que se repite cada vez que las cosas van mal en el Athletic. Lamikiz asumió su error en la planificación de la pretemporada pasada (por la inclusión en la Intertotto, "algo que hicimos con buena fe") y en el caso Zubizaurre, el ex jugador de la Real presentado por el Athletic y sobre el que pesan dos sentencias desfavorables para el jugador y para el Athletic por incumplimiento de contrato. "Yo asumno toda la responsabilidad", dijo Lamikiz, "aunque aún no se ha resuelto y ya se arreglará". El Athletic podría ser responsable subsidiario de 5.000 millones de cláusula de rescisión. El resto era culpa de la anterior directiva: aireó, por primera vez en la historia del Athletic, el contrato de un miembro, Andoni Zubizarreta, ex director deportivo, como antes se aireó la oferta a Valverde, algo insólito en el club, pero no los contratos de sus colaboradores. Y, hablando del nuevo campo, Lamikiz puso énfasis en señalar que en su Junta no había constructores, lo que se entendió como un reproche acusador a la anterior Junta Directiva.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 24 de mayo de 2006