La votación anoche de una ley con la que se preveía garantizar la continuidad del carácter público de ciertas empresas sirvió para escenificar la nueva relación entre ERC y el PSOE después de la ruptura del Gobierno conjunto en Cataluña. Los senadores de Esquerra votaron junto al PP para que el pleno del Senado diera por un solo voto un inesperado no a la ley. ERC permitió que se rechazaran las enmiendas y el veto del PP. Después, votó contra el texto.
Su actitud no tendrá consecuencias, porque el Senado sólo puede vetar o enmendar las leyes, pero no rechazarlas. El texto irá directamente al BOE.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de mayo de 2006