Uno o más gamberros causaron ayer la pérdida de miles de litros de agua, que inundaron la plaza de Olavide (distrito de Chamberí), al taponar con plásticos los aliviaderos de la fuente ornamental de la plaza y abrir la llave de llenado del monumento.
Los vecinos, que se quejaron por la lentitud de la actuación del Ayuntamiento de Madrid, alertaron al municipio minutos después de las nueve de la noche, cuando el agua ya sobrepasaba el nivel máximo de la fuente. En pocos minutos el agua fue cubriendo la zona peatonal de la plaza y alcanzó la calzada de las calles que la rodean.
Un portavoz municipal explicó que, tras recibir el aviso de los vecinos, varios operarios acudieron a la plaza. Éstos se encontraron con los aliviaderos de la fuente taponados intencionalmente con varios plásticos. Este portavoz, que calificó de gamberrada el hecho, aseguró que una hora después del aviso la fuente estaba reparada y admitió la pérdida de miles de litros de agua.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 1 de junio de 2006