El eurodiputado socialista Carlos Carnero presentó ayer una pregunta en la Comisión Europea en la que le insta a oponerse al plan del Ayuntamiento de Arroyomolinos de construir viviendas en 154 hectáreas que, según la Consejería de Medio Ambiente, deberían formar parte del Parque Regional del Curso Medio del Guadarrama. Su partido propondrá además en la Asamblea regional que el Gobierno de Esperanza Aguirre modifique la ley del parque para incluir esos terrenos.
La ordenación del territorio que el Ayuntamiento de Arroyomolinos ha sometido a información pública y enviado a la Consejería de Medio Ambiente, recalifica 154 hectáreas para construir 3.700 viviendas. El diputado Nolla sumó ayer a esos terrenos una parcela de unas 19 hectáreas situada al sur del complejo de ocio Xanadú. Esa franja de terreno está calificada en la actualidad como "suelo preservado por su valor agrícola", pese a que Medio Ambiente dictaminó en una resolución de 2001 que debía clasificarse como suelo protegido y ser incluida en el parque regional.
Según el avance de planeamiento presentado por Arroyomolinos, esta finca pertenece a la Comunidad de Madrid a través de la empresa Arpegio, y la califica como suelo urbano no consolidado. "El uso característico sería el de parque tecnológico", agrega.
"Estamos ante un atentado contra el medio ambiente", afirmó Nolla. "Pero es especialmente inconcebible que sea el Gobierno regional, a través de Arpegio, uno de los culpables del atropello ambiental. Con el agravante de que, al clasificarlo como suelo urbanizable, se impide que tenga que hacer la cesión de suelo para redes supramunicipales", agregó.
Una portavoz de Arpegio explicó que no hay planes para esos terrenos y menos para un parque tecnológico.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 1 de junio de 2006