El ministro del Interior francés, Nicolas Sarkozy, sonríe durante el partido que disputaban ayer Rafael Nadal y Paul-Henri Mathieu en Roland Garros, el principal torneo de tenis del mundo en tierra batida. Sarkozy, cuya vida sentimental ha sido últimamente objeto de la atención pública, acudió al partido con una mujer, que no es su esposa, y cuya identidad se desconoce.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 4 de junio de 2006