El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, afirmó ayer en Palma que si el PP "se aleja del consenso social amplísimo" que existe en España "en los albores de un llamado proceso de paz" para el fin de ETA, no "perjudica al Gobierno sino que perjudica a los ciudadanos españoles. Y lo tendrá que explicar a todos".
Rubalcaba recordó al líder del PP, Mariano Rajoy, que "los ciudadanos tienen el derecho a soñar por la paz" y le emplazó a no apartarse de "esta esperanza de paz que se ha de convertir en paz". Ensalzó el trabajo colectivo de "la democracia, que lo ha hecho bien. Es decir, los jueces, fiscales, fuerzas de seguridad, instituciones y partidos...".
El consenso general para el Gobierno tiene como objetivo "acabar con la violencia" a través de un método que es "el diálogo firme y generoso a la vez". Aventuró que la paz "se puede" conseguir, siempre en "el marco de la Constitución". Y agregó: "Tenemos un compromiso con la paz en España que estamos cumpliendo". Consideró que el Estado nunca ha renunciado a "sus principios" ni ha "bajado la guardia".
Rubalcaba reseñó que ETA decretó el alto el fuego, no ha cometido un atentado mortal en tres años y que "en los últimos meses no ha habido ni chantaje, ni extorsión ni violencia de ningún tipo en ningún lugar de España". El ministro participó ante 700 militantes del PSOE, en la presentación del ex presidente Francesc Antich como candidato socialista para intentar arrebatar a Jaume Matas, del PP, la presidencia de Baleares en 2007.
La campaña del Estatuto de Cataluña ha servido, según Rubalcaba, para poner en evidencia al PP y la estrategia de "discursos terribles de que España se rompe, que la gente no olvida". Dijo Rajoy que "hay que votar no al Estatuto para echar a Zapatero; esa es la realidad de su discurso no porque España se rompe". El responsable de Interior detalló contradicciones del PP: "Rajoy pide el voto contra el Estatuto y al tiempo Josep Piqué ofrece un Gobierno con quien rompe España en Cataluña, con CiU. Es falso todo".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 5 de junio de 2006