Unas 200.000 personas, según cálculos de la policía, acudieron ayer en Madrid a la concentración convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) para rechazar todo diálogo con ETA y reclamar "la verdad" sobre el 11-M. En la cuarta manifestación de la AVT desde que el PSOE ganó las elecciones de 2004 y la primera desde que ETA declaró el alto el fuego permanente, miles de asistentes corearon gritos de "negociar es claudicar" y arremetieron contra el jefe del Gobierno. El presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz, llegó a decir que José Luis Rodríguez Zapatero "traiciona" a los españoles en este proceso. Mariano Rajoy, que asistió junto a la cúpula del PP, afirmó que los españoles quieren "la derrota de ETA" y no una negociación con la banda. Zapatero sostuvo que "la mayoría de los españoles" apuesta por la paz.
MÁS INFORMACIÓN
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 11 de junio de 2006