La exposición Los Picassos de Antibes, que se clausuró el pasado domingo 11 en el Museo Picasso de Málaga, ha atraido la atención de 83.485 personas, según los cálculos difundidos ayer por la propia la pinacoteca. La muestra, inaugurada el pasado 13 de marzo, recogía obras del pintor malagueño realizadas entre 1946 y 1947 en el castillo Grimaldi de la localidad de la Costa Azul francesa -entre ellas el mural La alegría de vivir o el lienzo El devorador de erizos de mar- en las que se percibía el Picasso más vitalista tras los oscuros años de la Segunda Guerra Mundial. La exposición, que ha sido posible gracias a que el Museo Picasso de Antibes se encuentra en obras de reforma, se trasladará al centro dedicado al pintor malagueño en Barcelona, donde se podrá ver del 4 de julio al 15 de octubre.
El Museo Picasso Málaga ya está preparando la próxima muestra temporal del pintor, que será inaugurada el próximo mes de octubre con el título de Picasso. Musas y modelos. En ella se realizará una revisión del papel de la mujer como sujeto artístico en la obra de Pablo Picasso. A través de 70 obras entre pinturas, dibujos y esculturas, la exposición reflexionará sobre la poderosa presencia femenina en la plástica del artista.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de junio de 2006