Cómicos es algo más que el nombre de un espectáculo en el que se ofrecen monólogos salpicados de humor y con el que los espectadores se desternillan en el teatro Fígaro. La diferencia con otras fórmulas escénicas similares que se han visto por las televisiones y escenarios está en que aquí el espectador es un cómplice directo al que los actores involucran en el proceso, aunque sin someterle a lo que muchos podrían calificar de torturas innecesarias.
El espectáculo siempre cuenta con cuatro actores en escena, aunque no necesariamente los mismos todos los días, ya que en Cómicos trabajan Máximo Pradera, José Ignacio Salmerón (Sinacio), José Luis Izquierdo (More), Daniel de la Cámara, Leo Harlem, Juan Luis Hurtado e Iñaqui Urrutia.
"Nosotros también tenemos banquillo, como en la selección española", apunta Pradera, el popular periodista quien llega a este montaje con una alta dosis de retranca ya que en sus labores de presentador y maestro de ceremonias la guasa la empieza por sí mismo, haciendo claras referencias irónicas sobre su trayectoria profesional.
Lenguaje diferente
Cómicos también es un equipo dispuesto a trabajar exclusivamente por y para el humor, tanto en los proyectos que les llegue a sus manos como en otros de iniciativa propia en el terreno de la televisión, teatro, radio, libros, series, cine "sin olvidar la bonita camiseta", apunta Pradera, quien considera que la diferencia de Cómicos con respecto a otros espectáculos parecidos radica en el lenguaje: "En televisión hay que decir pompis en vez de culo, la tele impone su modelo políticamente correcto y descafeína el producto, además el monólogo es para verlo rodeado de gente y reírse de lo que se oye y también de la risa del vecino".
Risas que se contabilizan con "un risomatic", (un contador de risas que recoge las carcajadas espontáneas del público): "No como en televisión que son de regidor", dice Pradera quien se incorporó al montaje tras verlo mientras estaba de gira: "Vi que el talento no estaba en la televisión sino en el teatro, un medio que te hace más crítico contigo mismo porque el público te está diciendo lo que funciona o no".
Cómicos. Teatro Fígaro. Calle del Doctor Cortezo, 5. De 15 a 20 euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de junio de 2006