El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, esperará a la reforma de la ley general del IRPF para cumplir con su compromiso de eximir del pago del tramo autonómico a las rentas inferiores a los 12.000 euros anuales. "No hay incumplimiento, sino una decisión de prudencia", afirmó el socialista en respuesta a una pregunta de la presidenta del grupo popular, Teófila Martínez, en la sesión de control del Parlamento andaluz.
Chaves prometió en su discurso de investidura rebajar la presión fiscal a las rentas más bajas, un compromiso que, según las previsiones iniciales de la Junta, debía haberse aprobado en la ley de los Presupuestos autonómicos de este año. Pero el anuncio por parte del Gobierno central de modificar la ley que regula el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF) aconsejó al Ejecutivo andaluz posponer su aplicación.
El presidente andaluz no comprometió ayer ningún plazo de eximir del tramo autonómico a las rentas inferiores a 12.000 euros, una medida de la que se beneficiarían unas 700.000 personas. La rebaja en ese tramo normativo se aprobará "en próximos presupuestos", una vez que las Cortes aprueben la nueva ley del IRPF. Según él, razones de "eficacia", "rigor" y "prudencia" aconsejan la demora.
"Es la excusa más infantil y tonta que he escuchado en mi vida", le replicó Teófila Martínez. La popular reprochó a Chaves que en otras ocasiones no haya tenido en cuenta el ritmo de la legislación estatal para tomar decisiones, por lo que consideró el retraso como otro "flagrante incumplimiento".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de junio de 2006