La lluvia cayó con intensidad en toda la región. Barrió la Comunidad de sur a norte. El Instituto Nacional de Meteorología (INM) había avisado a primera hora de la mañana de ayer de la posibilidad de que se produjeran chubascos y tormentas que localmente podrían superar los 20 litros en una hora, además de advertir de fuertes vientos superiores a los 80 kilómetros por hora.
El INM envió un primer aviso a las siete de la mañana en el que informó de que se observaban tormentas en el suroeste de la Comunidad que, muy probablemente, producirían precipitaciones muy fuertes, granizo superior a un centímetro y rachas de fuertes vientos, que se desplazaban en dirección norte.
Tres horas más tarde el INM mandó un nuevo comunicado advirtiendo de la posibilidad de que durante el día se produjeran chubascos y tormentas que superaran los 20 litros en una hora y vientos de más de 80 kilómetros, así como granizo inferior a dos centímetros.
Ligero aumento
Pero toda esta agua caída en la región no era apreciable ayer en los embalses, que estaban al 55,94% de su capacidad, frente al 56,1% del día anterior. Los expertos indican que este tipo de tormentas en las que caen mucha lluvia en poco tiempo no es "la mejor manera" de recoger provisiones. Aun así, es posible que los embalses registren una ligera elevación de sus niveles durante el fin de semana si, como está previsto, siguen las lluvias. El agua caída tarda días en filtrarse y alcanzar los acuíferos.
Según la información facilitada por el INM, para hoy están previstos cielos muy nubosos con chubascos débiles por la tarde localmente moderados, con posibilidad de que sean localmente fuertes, sobre todo en la sierra.
Las temperaturas nocturnas experimentarán un ligero descenso y las diurnas no sufrirán cambios o un ligero ascenso, con vientos de dirección variable, girando al suroeste por la tarde, que serán flojos. Para mañana, se prevén chubascos y tormentas débiles y temperaturas sin cambios.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 16 de junio de 2006