Miembros de Amnistía Internacional reclamaron ayer el cierre de Guantánamo y recrearon en la plaza de la Virgen de Valencia el caso del ciudadano etíope Benyam Mohamed Al Habashim, asilado en el Reino Unido desde 1994, detenido en Pakistán en 2002 y torturado en Pakistán, en Marruecos y en Afganistán hasta septiembre de 2004, cuando fue trasladado a la prisión estadounidense de Guantánamo, en Cuba. Al Habashim no ha visto a un juez en todo su periplo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 26 de junio de 2006