El Parlamento Europeo aprobó ayer un informe que contiene un paquete de propuestas para reducir la incesante escalada de la contaminación que producen los vuelos. Entre las medidas impulsadas por la diputada británica verde Caroline Lucas, ponente de la propuesta, figuran la aplicación de una tasa sobre el queroseno, la reducción o abolición de las exenciones sobre el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) y la creación de un mercado de derechos de emisión de la aviación independiente del que ya existe en el sistema general.
La propuesta fue aprobada por la Eurocámara por 439 votos a favor, 74 en contra y 102 exenciones. Las emisiones de los aviones representan un 12% de la contaminación que causa el transporte y un 3% de la polución total. Sin embargo, su crecimiento es mucho más rápido que en otros sectores de la actividad industrial por la generalización del uso de aviones.
Los últimos estudios de la Comisión Europea revelan que las emisiones de la aviación han crecido un 73% entre 1990 y 2003. Las mismas fuentes indican que a este ritmo la contaminación aérea neutralizará más de un cuarto de las reducciones que Kioto requiere para el año 2012.
Lucas se mostró especialmente preocupada por la proliferación de los vuelos baratos. En su opinión esta situación "es insostenible" y habría que preguntarse "quién paga realmente la factura de la contaminación" de estos vuelos. "El problema" no está "en quién usa un avión una vez al año para ir de vacaciones, sino quién lo hace de forma habitual", dijo la eurodiputada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 5 de julio de 2006