Bruce Springsteen tocará el 24 de octubre ante un Palau Sant Jordi lleno. Las 18.000 entradas para el concierto de Barcelona que se pusieron a la venta ayer a las diez de la mañana se agotaron en dos horas. El sistema informático funciónó correctamente, y eso agilizó la venta presencial. En cambio, la compra por Intenert topaba con un sistema colapsado. A las ocho de la mañana las colas a las puertas de la FNAC del Triangle, recorrían la calle de Bergara hasta su confluencia con Pelai. "Somos menos que en otras ocasiones", comentaban algunos incondicionales del boss que habían pasado la noche tumbados sobre unos cartones. Raimon, de Llevaneres, encabezaba la cola. Llegó a las cuatro de la tarde del lunes y 16 horas más tarde agotaba la espera entre risas y bromas. Un vecino de Calella explicaba: "Para venir, he dicho en el trabajo que estaba enfermo". En la tienda Gong de Consell de Cent la cola llegaba a la Rambla de Catalunya. Josep Colomer, de 74 años, llegó el lunes a las ocho de la tarde para comprar entradas a sus nietos. "Si no lo hago por ellos, ¿por quién lo voy a hacer?", decía. Tras él, Leo, un italiano afincado en La Garriga, confiaba en revender las entradas. "A mí no me gusta".
El periplo de Springsteen por España se iniciará en Madrid el 19 de octubre. Mañana salen a la venta las entradas de los conciertos de Madrid y Granada (22 de octubre). Las de los conciertos de Valencia (21 de octubre) y Santander (25 de octubre) se pondrán a la venta el 18 de julio.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de julio de 2006