Los mercados de valores comienzan a definir un movimiento lateral que algunos análisis consideran compatible con una corrección a corto plazo, sobre todo porque el volumen de la contratación no acompaña en absoluto.
Frente a la aparente estabilidad del conjunto del mercado, los valores bancarios españoles se desmarcaron ayer e iniciaron una corrección por su cuenta, lo que explica por qué la Bolsa española tuvo un resultado más flojo que el del resto de los mercados europeos. Para algunos observadores, la acumulación de ganancias en los valores bancarios no se corresponde con sus decisiones más recientes y ayer el mercado parecía darles la razón.
El Ibex 35 terminó esta sesión con un avance del 0,02% que parecía anunciar descuentos inmediatos debido al precario equilibrio entre compras y ventas. Los valores medianos se apuntaron un avance del 0,34% y los pequeños ganaron el 0,95%.
La publicación del incremento del PIB del primer trimestre en la eurozona, con el 2% en tasa interanual, quedó desdibujado por la revisión a la baja de las expectativas para el segundo y tercer trimestres lo que, de paso, se interpretó como un posible freno a las subidas de los tipos de interés con que ya cuenta el mercado. Aun así, los inversores se muestran muy conservadores en los últimos días, pero es más por la propia altura de las cotizaciones que por cambios sustanciales de las perspectivas a corto y medio plazo.
La contratación en el Mercado Continuo ascendió hasta los 4.070,25 millones de euros, con algo más de 1.700 millones en operaciones de bloques con tres valores, SCH, Endesa y BBVA. Las operaciones abiertas, por su parte, mejoraron ligeramente el nivel del día anterior, con 2.131,14 millones de euros, una cifra que continúa apuntando hacia el incremento de la prudencia por parte de la mayoría de los inversores.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 13 de julio de 2006