Los empresarios Fidel San Román e Ismael Pérez Peña, detenidos en la Operación Malaya contra la corrupción en el Ayuntamiento de Marbella, quedaron a primeras horas de la noche del martes en libertad provisional tras permanecer encarcelados, el primero desde el 30 de junio y el segundo desde el 31 de marzo.
Fuentes penitenciarias informaron de que los dos salieron de la prisión de Alhaurín de la Torre (Málaga) a primeras horas de la noche. El constructor y ganadero San Román, empresario de la plaza de toros de Las Ventas de Madrid, está imputado de un delito de cohecho en relación con el tráfico de influencias y prevaricación. A Pérez Peña, empresario de arrendamiento de vehículos municipales y responsable de la concesión del servicio de grúa de Marbella, el juez le imputa la entrega de vehículos y dinero a cambio de conseguir la citada concesión.
San Román prestó el pasado lunes una nueva declaración ante el juez del caso. Fuentes de su defensa precisaron que giró en torno a los problemas de salud del imputado, base de la solicitud de excarcelación presentada por su abogado y ampliada con la incorporación de nuevos informes médicos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 20 de julio de 2006