La policía fue el objetivo principal de los ataques registrados ayer en Irak. En la capital murieron tres policías en dos atentados, mientras en el resto del país una veintena de personas perdió la vida en diversos ataques.
En los enfrentamientos en la capital se contabilizaron las muertes de 10 personas. En el primer ataque murió un policía y ocho civiles resultaron heridos al explotar un coche bomba al paso de una patrulla de las fuerzas de élite del Ministerio del Interior iraquí.
Otras dos personas murieron en la capital cuando su coche fue tiroteado. Además, se encontraron los cuerpos sin vida de ocho personas que habían sido previamente ejecutadas en varios distritos de la ciudad.
En Baquba, 60 kilómetros al norte de Bagdad, aparecieron los cuerpos sin vida de siete personas asesinadas a tiros. Al sur de la capital, en la localidad de Al Rachid, las fuerzas de seguridad iraquíes encontraron los cadáveres de cinco personas con impactos de bala y signos de tortura.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 26 de julio de 2006