Los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad no lograron anoche alcanzar un acuerdo final sobre el borrador de resolución, que debe de conducir el cese inmediato de las hostilidades entre la milicia libanesa Hezbolá e Israel. Los avances logrados por la mañana entre EE UU y Francia, los patrocinadores del texto original, llevaron al embajador norteamericano, John Bolton, a predecir un voto inmediato. Pese al revés posterior, permaneció optimista: "No he renunciado a mis esperanzas de que pueda ser sometido a votación mañana [hoy]".
Los cambios pactados incluyen, según fuentes diplomáticas consultadas, la retirada progresiva de Israel del sur del país tan pronto como las Fuerzas Armadas libanesas comience a asumir el control de la zona de la mano de la fuerza multinacional. El texto también establece el alejamiento de Hezbolá de la frontera israelí. Anoche, el Gobierno libanés hizo público su rechazo al nuevo borrador, lo que dificultará su aprobación.
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Ante este nuevo bloqueo diplomático, Rusia presentó su propio texto de resolución, en el que se incluye la exigencia de "un alto el fuego humanitario" inmediato, idea que ya rechazó hace unos días el Gobierno israelí.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 11 de agosto de 2006