Andrea Pierre Casiraghi, hijo de la princesa de Carolina de Hannover, viajó por Filipinas, donde visitó albergues y casas de acogida para niños que han sido abandonados o han sufrido abusos. Los refugios son financiados por la Fundación Amade, que patrocina su madre.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 25 de agosto de 2006