Un avión del Ejército del Aire de Senegal interceptó el martes, a 60 kilómetros al sur de San Luis, a un grupo de 97 inmigrantes que navegaban hacia España. Un barco de la Armada senegalesa los recogió y fueron llevados a la comisaría del puerto de Dakar, en cuyos pasillos pasaron la noche, a la espera de que la policía les tomara declaración. El Gobierno senegalés les considera sospechosos de un delito de tráfico de personas, que se castiga con penas de entre 5 y 10 años de prisión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 14 de septiembre de 2006