La Guardia Civil de Almería detuvo ayer al cuñado de la mujer hallada muerta con signos de violencia en la cocina de su domicilio, en la localidad almeriense de Pulpí, como presunto autor de un supuesto delito de homicidio. Según informaron fuentes de la Benemérita, que recoge Europa Press el arresto del cuñado, cuyas iniciales corresponden a A.O.E., se produjo sobre el mediodía. A su vez, las mismas fuentes precisaron que, aunque continúan las investigaciones para esclarecer la muerte violenta de D.P., de 36 años de edad, separada y con dos hijas menores de edad, el presunto autor utilizó un arma blanca para llevar a cabo el presunto asesinato.
El cadáver de María Dolores Pradas, de 38 años, fue hallado con evidentes signos de violencia en la cocina de su casa en la calle Los Manchaos, en Pulpí. Pese a que en un primer momento se barajó el maltrato doméstico como móvil del caso, las investigaciones policiales descartan este extremo y toma fuerza el móvil del robo. La mujer estaba separada, aunque no se conocen denuncias por malos tratos y sus vecinos aseguran que mantenía buenas relaciones con su ex marido.
Su ex marido y su cuñado declararon en la mañana de ayer en el cuartel de la Guardia Civil de la localidad, poco después el cuñado fue detenido.
Algunas versiones de vecinos de la víctima indicaron ayer que en torno a las 5.30 de la mañana dos individuos se introdujeron en la vivienda y los ruidos alertaron a su propietaria, que dormía con sus dos hijas de 9 y tres años. Al llegar a la cocina descubrió a los asaltantes que le propinaron una brutal paliza y presumiblemente fue violada por uno de los individuos. A las 6.00 horas un vecino, que escuchó gritos. El cuerpo fue trasladado ayer al tanatorio de Almería para la práctica de la autopsia. El juez ha decretado secreto de sumario y en Pulpí se han suspendido las fiestas que arrancaban ayer.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 28 de septiembre de 2006