En la tarde clara, meandros,
leve niebla en el alma errante,
los grandes ríos desde el aire
-en el muy último sol brilla
el metal-, y abajo la línea
sin término de una carretera
por la que avanza ese camión
sobre el que jamás sabrás nada,
carretera que parte el mundo
exactamente en dos mitades.
Tras el continente vacío,
tras el Plata ya en noche oscura,
la euforia no conoce límites:
el inmenso encaje de luz
de la metrópolis austral.
Juan Manuel Bonet (París,1953) es autor de libros de poemas como Café des exilés y Praga (ambos en Comares-La Veleta). Este poema es el primero de una suite de cinco, que bajo el título Dock Sud, se publicarán este otoño en una edición de bibliofilia, acompañados por otros tantos aguafuertes de Alejandro Corujeira.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 21 de octubre de 2006