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La traducción automática se orienta hacia la lectura de los labios

Traducción simultánea automática. Un dispositivo que captará los movimientos de la boca sin que haya que pronunciar sonidos y los convertirá en la misma palabra en otro idioma será la siguiente frontera de los aparatos de traducción automática, según publicó ayer la revista digital New Scientist. El invento todavía tardará, pero ya está en marcha, dijo la portavoz de la universidad Carnegie Mellon en Pittsburgh (Pensilvania).

Lo más lejos que se ha llegado hasta ahora en este campo es en aparatos que captan la voz del hablante y la convierten en palabras de otro idioma. Ello dificulta la comunicación, ya que ambos sonidos se superponen (o hay que ir esperando a que se calle la máquina para pronunciar la siguiente palabra). El nuevo aparato captará mediante electrodos instalados en la cara del orador sus movimientos. No habrá que emitir ningún sonido, y el aparato procesará las señales y las convertirá en palabras de otro idioma. Será como si un cantante que actúe con sonido figurado simule que dice "te quiero" y el aparato dirá "I love you".

En verdad, será al revés. Los primeros prototipos convertirán la vocalización de palabras inglesas en españolas. También se prepara una versión en alemán.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 27 de octubre de 2006