A última hora del viernes, estando varias amigas en la terraza de una cafetería de la plaza del Patriarca de Valencia, un camarero les avisó de que vigilaran sus bolsos al ver merodear por la zona a tres jóvenes sospechosos. Y efectivamente momentos después -según el relato policial de una de las víctimas que creyó que en vez del robo de su bolso querían "secuestrar" a su hijo- los tres supuestos delincuentes al acecho se acercaron al carrito de un bebé que había junto a la mesa y uno de ellos metió las manos en el cesto en un intento por robar el bolso.
Cuando el grupo de mujeres se percataron de que estaban hurgando en el carrito del bebé gritaron y los tres jóvenes salieron corriendo despavoridos. Mientras, la víctima del robo llamaba a la Policía para denunciar literalmente: "Han intentado secuestrar a mi hijo". Ante las descripciones "muy precisas" de los testigos oculares, la policía no tardó en localizar a los tres jóvenes, que son autores conocidos de varios robos al descuido.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 29 de octubre de 2006