La coalición Iniciativa Verds-Esquerra Unida (ICV-EUiA), encabezada por su líder, Joan Saura, eligió ayer un recinto de la localidad barcelonesa de L'Hospitalet de Llobregat para clausurar la contienda electoral. Arropado por la plana mayor de la formación ecosocialista y aupado por cerca de 500 seguidores, Saura realizó el sprint final hacia la presidencia de la Generalitat haciendo un llamamiento a los electores del PSC que puedan sentirse desilusionados por la sustitución de Pasqual Maragall por José Montilla, y a los simpatizantes de ERC desorientados por haber preconizado el no al Estatuto.
Temeroso de que acabe por caer en el saco socialista, Saura pidió el voto útil de izquierdas para su formación en la última oportunidad del candidato ecosocialista para acabar de convencer a sus electores habituales y seducir a los que todavía están indecisos. Insistiendo en que la familia rojiverde es la única formación política de izquierdas que no oculta sus preferencias poselectorales, que apuesta abiertamente por la reedición del Gobierno tripartito, exclamó con fuerza: "¡Que la gente progresista no se equivoque, que no dude y que nos vote!"
Por la mañana, en su penúltima actividad electoral, Joan Saura viajó al municipio barcelonés de Mollet del Vallès para visitar la empresa química KAO Corporation, que cuenta con más de un centenar de empleados y ostenta un récord de 655 días sin haber registrado un solo accidente laboral.
Saura lanzó un mensaje de tranquilidad al empresariado al poner a la compañía como ejemplo de que la ecología no es incompatible con el crecimiento económico, sino que resulta una "condición necesaria". Los directivos de la compañía reclamaron al líder de ICV-EUiA más ayudas e inversión de la Generalitat en investigación y desarrollo (I+D), y una mayor agilidad de los trámites necesarios para lanzar productos al mercado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 31 de octubre de 2006