La compleja situación política catalana tras las elecciones del miércoles requiere todo menos interferencias de los partidos de ámbito nacional. Así lo defienden los líderes del tripartito (PSC, ERC y ICV) y así lo verbalizó ayer Joan Saura, presidente de Iniciativa per Catalunya Verds. En concreto, Saura pidió al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, que haga "callar" a los dirigentes de su partido que en los últimos días han expresado sus preferencias por un acuerdo entre CiU y el PSC por encima del tripartito.
El líder ecosocialista (Joan Saura) criticó especialmente las palabras del presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, quien el pasado viernes expresó la conveniencia de que sea CiU quien gobierne en Cataluña y defendió que las elecciones catalanas tengan una segunda vuelta para que los ciudadanos también se pronuncien sobre las alianzas de los partidos. Saura consideró "una barbaridad" las palabras de Ibarra. "¿Qué se ha creído?" se preguntó.
Saura se refirió también a las palabras del ex ministro de Defensa José Bono y del presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, quienes también pusieron objeciones a que el PSC encabece el futuro gobierno de Cataluña. Chaves reconoció que CiU parte "con mejores condiciones" que el PSC para formar gobierno por su condición de ganador de las elecciones. Con todo, reconoció que los socialistas catalanes podrían reeditar el tripartito, aunque dejó claro que deberían hacerlo con otras condiciones. "No creo que esa experiencia fuera muy buena", dijo. Bono tuvo menos reparos y no dudó en calificar de "suicida" un nuevo pacto tripartito.
"Segunda oportunidad"
Saura lamentó ayer estas palabras y lamentó que, aunque Zapatero ha explicitado que Montilla tiene las manos libres para pactar, "los suyos no le hacen caso". En cualquier caso, el líder catalán se mostró "optimista" en relación con la reedición del tripartito, pues considera que los ciudadanos le han dado "una segunda oportunidad" en las urnas.
Joan Saura coincide con los dirigentes del PSC y de ERC en que lo prioritario es establecer las bases de la negociación. Y, para empezar, aumentar el grado de "confianza mutua" de los tres partidos después de la accidentada salida de Esquerra republicana de Catalunya del Gobierno del socialista Pasqual Maragall no hace ni seis meses.
El consejo nacional de ICV se reunió ayer para evaluar los resultados de las elecciones del pasado domingo. Constataron que los ecosocialistas son la única formación que incrementan el número de votos pese al aumento de la abstención lo que les ha dado alas ante las elecciones municipales del próximo mayo. Para estos comicios, ICV espera poder presentar multiplicar por dos el número de candidaturas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 5 de noviembre de 2006