Los hospitales y centros de salud valencianos vivieron ayer un día marcado por la desorganización. La falta de previsión en el cese y el relevo en la toma de posesión y traslados de las plazas de enfermería de la última oferta de empleo, que ayer se hizo efectiva, hizo que muchos servicios se quedaran sin personal suficiente o experimentado, como la UCI de neonatos del hospital La Fe de Valencia.
"Me acabo de tomar un valium. Si no, me da un ataque", relataba ayer una enfermera del centro de salud de Benimaclet en Valencia. "De las 18 enfermeras de plantilla, han cesado 10 y nos hemos tenido que apañar para sacar el trabajo como podemos entre ocho: cinco por la mañana y tres por la tarde", se lamentaba. En función del tipo de traslado o consolidación, el personal que tomará posesión de su nueva plaza tiene tres días, 15 o incluso un mes para comenzar a trabajar, por lo que "tres días seguro que estamos solas", apuntaba ayer esta trabajadora. También en otros centros de salud, como el de la Font de San Lluís de Valencia, tuvieron problemas similares.
En total, 2.000 trabajadores de enfermería han consolidado su puesto de trabajo como resultado de la oferta de empleo público iniciado en 2002. El problema ha sido que este proceso no ha tenido una puesta en marcha gradual, sino que el cese del personal con nuevo destino fue ayer en bloque y -en el mejor de los casos- hoy la incorporación de los nuevos. De esta forma, no se ha podido producir una formación progresiva de los profesionales que se incorporan, por lo que en servicios que requieren de gran especialización y donde ha habido un importante relevo, ha habido complicaciones. Es el caso de la uci de neonatos, donde de los 41 trabajadores de la plantilla de enfermería, 23 han cesado o se han trasladado. Ayer aún no se habían cubierto las nuevas plazas, por lo que las enfermeras más experimentadas tuvieron que asumir todo el trabajo. Hasta el punto de que cinco madres tenían ayer previsto pasar la noche para reforzar la atención de sus pequeños. En intensivos de pediatría el relevo ha sido del 40% de la plantilla y se ha reforzado el trabajo "para que los niños no noten nada", como apuntaron desde el servicio.
Sanidad indicó ayer que la situación es "de absoluta normalidad".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 8 de noviembre de 2006