El transporte y la energía serán los dos elementos que soportarán la llamada fiscalidad verde, que el Ministerio de Economía y Hacienda pretende concretar a lo largo del año próximo. El secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, avanzó ayer que no se crearán impuestos nuevos ligados al medio ambiente, sino que se incrementarán algunos ya existentes para penalizar el efecto contaminante. "Se trata de que los ya existentes reflejen mejor el coste medioambiental", señaló Ocaña en un encuentro organizado por el diario Cinco Días.
Ocaña citó como ejemplo el impuesto de matriculación para vehículos muy contaminantes como los todoterreno. En financiación autonómica se mostró partidario de dar más competencias a las comunidades para que puedan subir el IRPF, el IVA minorista y los impuestos especiales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 15 de noviembre de 2006