La cadena de televisión estadounidense CNN ha sido acusada de ser responsable del trauma emocional que condujo a Melinda Duckett, de 21 años, a quitarse la vida el pasado septiembre en Orlando (Florida). Los familiares de Duckett, madre de un niño de dos años desaparecido desde agosto, consideran que la mujer se suicidó por el interrogatorio agresivo al que la sometió, un día antes, la periodista de la cadena Nancy Grace.
Según el fiscal, Grace animó a Duckett a intervenir en su programa con la promesa de que ello la iba a ayudar a localizar a su hijo Trenton. Según han asegurado recientemente las autoridades de Florida, Duckett es la principal sospechosa de la desaparición del niño.
Los padres de la suicida acusan a la periodista de haber dado por buena esta hipótesis en su entrevista, sin permitir que su hija pudiese aportar su versión. La lectura en un periódico de las conclusiones de la periodista sobre el caso, dicen, fue lo que empujó a Duckett a encerrarse en un armario y dispararse con la escopeta de su abuelo.
Según el fiscal, Grace asumió indebidamente el papel de un representante de la ley sabiendo que su entrevistada estaba emocionalmente perturbada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 24 de noviembre de 2006