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CARTAS AL DIRECTOR

Sobre la seguridad aérea

El artículo del eurodiputado señor Guardans, publicado en el diario EL PAÍS el pasado 23 de noviembre, sobre las restricciones aplicadas a los líquidos transportados en el equipaje de mano de los pasajeros aéreos, requiere algunas precisiones:

La Comisión consulta al Parlamento Europeo antes de adoptar cualquier decisión sobre nuevos requisitos de seguridad en el sector de la aviación. La Comisión Europea informa sistemáticamente al presidente de la Comisión de Transportes del Parlamento Europeo tan pronto como finalizan las consultas con los expertos en seguridad de los Estados miembros y adopta una decisión únicamente tras haber recibido una respuesta positiva en nombre del Parlamento Europeo. Las restricciones en el caso de los líquidos no han sido una excepción al respecto.

La Comisión no puede hacer públicos todos los detalles sobre las normas de seguridad vigentes en los aeropuertos. Iría en detrimento de la eficacia de las disposiciones de seguridad si los terroristas pudieran obtener información detallada de las medidas adoptadas en los aeropuertos.

No obstante, los Estados miembros, la Comisión y el sector del transporte aéreo han aunado sus esfuerzos para garantizar que los pasajeros obtengan la información necesaria para preparar sus viajes. En el caso de las restricciones de los líquidos, la Comisión colaboró con las compañías aéreas y aeropuertos de Europa para que los cambios se introdujeran de la forma más armoniosa posible.

Además, se invitó a los Estados miembros a informar a los viajeros acerca de los artículos que no pueden transportarse en los aviones. La Comisión no dispone de ninguna información que sugiera que los Estados miembros han incumplido sus obligaciones al respecto.

Deseo señalar que la decisión sobre los líquidos se adoptó tras llevar a cabo con los expertos en seguridad un análisis en profundidad sobre la necesidad de hacer frente a nuevas amenazas. Al tomar esta decisión, la Comisión intentó reducir al máximo las implicaciones para los viajeros.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 30 de noviembre de 2006