Al menos 17 militares murieron y otros cuatro resultaron heridos en un ataque de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas), perpetrado en la noche del jueves en el noreste del país, cerca de la frontera venezolana, anunció ayer el Ejército.
La guerrilla tendió una emboscada a una patrulla que efectuaba operaciones de control en una zona selvática del departamento Norte de Santander. "De acuerdo con las primeras informaciones, durante la acción, perpetrada por la cuadrilla Gabriel Galvis de las FARC, fueron asesinados dos oficiales y 15 soldados", señala el comunicado militar. El comandante del Ejército, general Mario Montoya, viajó desde Bogotá a la zona.
El ataque ocurre un mes después de que las FARC, que se financian con el tráfico de cocaína, mataran a 16 oficiales en un puesto de policía en la provincia de Córdoba. Tanto Córdoba como Norte de Santander acogieron en su día a numerosos grupos paramilitares, formados en los años ochenta para ayudar a los propietarios agrícolas a proteger sus tierras de los rebeldes. Muchas milicias, también vinculadas al narcotráfico, se han desmantelado como parte del acuerdo de paz firmado con el Gobierno, y las FARC han aprovechado para movilizarse hacia esas zonas estratégicas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 2 de diciembre de 2006