Cuatro personas murieron ayer en la prisión de la ciudad mexicana de Cancún, en un motín que se desató contra el traslado a otro penal de 40 presos peligrosos, entre ellos Marcos Adelaido Galleos, alias el Padrino, que controlaba de hecho el penal. Varios reos aprovecharon para fugarse. En la foto, dos de los amotinados protestan en el tejado de la cárcel.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de diciembre de 2006