Estoy asombrada de que nosotros, como adultos, no hagamos nada al respeto del cambio climático antes de que las cosas empeoren. Después de todos los documentales, noticias y hasta películas sobre ello, no estamos concienciados de que es un grave problema para nosotros y para nuestra descendencia. Sé que hay mucha gente que está trabajando en ello, pero no la suficiente como para poder llegar a mejorar nuestra situación. Realmente cada persona en su vida diaria tendría que participar en mejorar el problema a partir de pequeños detalles, como el reciclaje de los residuos, intentar no usar productos tóxicos, evitar ir en coche si se puede ir caminando...
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 19 de diciembre de 2006