Una avalancha imprevista de magrebíes en tránsito hacia Ceuta, Melilla y Tánger (Marruecos) mantuvo el sábado y el domingo colapsados los puertos de Algeciras (Cádiz) y Almería. La afluencia se debió a la coincidencia de las vacaciones navideñas de trabajadores africanos en Europa y la fiesta del Sacrificio del Cordero de los países musulmanes. Una dotación policial reforzada disolvió la protesta de un centenar de viajeros que cortó el domingo los accesos al puerto algecireño para mostrar su malestar por los enormes retrasos, momento que refleja la foto. Ayer se normalizó la situación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 26 de diciembre de 2006