La primera jornada de la regata Sidney-Hobart, entre la bahía de la ciudad olímpica y la costa de la isla de Tasmania, empezó dramáticamente ayer cuando seis tripulantes del Maximus quedaron heridos y tres tuvieron que ser evacuados en helicóptero con heridas en pecho, espalda y manos después de que su barco, como el ABN AMRO, se desarbolara durante la noche, perdiendo los mástiles, según los organizadores de la prueba.
Los dos barcos se vieron obligados a abandonar la regata, en la que el barco australiano Wild Oats defiende su victoria del año pasado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 27 de diciembre de 2006