Los seis alcaldes de la provincia de Lugo afectados por la concesión para explotar tres minas de cuarzo que abarcan 5.670 hectáreas de cuadrículas en los municipios de Castro de Rei, Cospeito, Abadín, Vilalba, A Pastoriza y Riotorto, acordaron solicitar una reunión urgente con el conselleiro de Industria, Fernando Blanco, para ver las posibilidades de derogar la concesión.
La decisión la adoptaron por unanimidad los seis regidores de la comarca de A Terra Chá, que entienden, al igual que asociaciones ecologistas y vecinales, que la concesión a cielo abierto de las explotaciones mineras es "un contrasentido" que ha generado "cierta alarma social", sostuvo uno de los alcaldes.
Ayer mismo tramitaron la solicitud de entrevista, ya que fue Industria quien otorgó la concesión de las explotaciones a la empresa Erimsa. De todas formas, el principal problema radica en el pronunciamiento favorable de la declaración de impacto medioambiental otorgada por el gobierno en funciones de la Xunta de Galicia, sin haber solicitado informes a Medio Rural, para determinar el impacto económico sobre la zona afectada, ni de la Confederación Hidrográfica del Norte, pese a que buena parte de la concesión discurre por la cuenca alta del Miño.
Los alcaldes también acordaron recabar la opinión de expertos, porque, aseguraron, "la ley de minas es muy compleja". Quieren agotar "todas las vías legales", y apurar "todas las posibilidades" para defender "los intereses de los vecinos". En una de las zonas más afectadas, ubicada entre los municipios de Castro de Rei y Cospeito, se asientan numerosas explotaciones agrícolas, especialmente de producción láctea.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 17 de enero de 2007