El Museo municipal de Málaga inauguró ayer la primera exposición retrospectiva del pintor malagueño Enrique Brinkmann, Hacia la luz, una muestra formada por 174 obras que han sido prestadas por coleccionistas particulares, galerías e instituciones, aunque la mayor parte de dichas obras son propiedad del autor.
La exposición, organizada por el Area de Cultura del Ayuntamiento de Málaga, está comisariada por Juan Manuel Bonet, ex director del Centro de Arte Reina Sofía de Madrid. La muestra abarca todas las etapas de producción del pintor desde 1957 hasta la actualidad e incluye un catálogo con textos del mismo Bonet, José Corredor Matheos y Juan Malpartida.
"No soy un pintor de un estilo concreto, ya que cuando he realizado una etapa, y considero que ya no puedo sacarle más, me surge una crisis que precede a una nueva tendencia", comentó ayer Enrique Brinkmann. "Me siento muy a gusto con lo que estoy haciendo desde hace una década", añadió y calificó su andadura de una carrera de "altibajos".
"Con esta exposición hemos conseguido hacer una antología adecuada. En Hacia la luz se logra ver cómo es el pintor desde el comienzo de su andadura como artista hasta el final", apuntó Bonet. Así, explicó el comisario que la propia distribución de las obras en las salas del museo "están haciendo un recorrido hacia la luz, que demuestra la evolución del artista, y en la que se puede ver como a pesar de su evolución, se mantiene constante". La exposición también dedica atención a sus dibujos y obra gráfica, que en 1994 le hizo merecedor del Premio Nacional de Grabado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 20 de enero de 2007