Unos 200 habitantes de la comunidad de Tierra Blanca, en el estado de Oaxaca en el sureste mexicano, apalearon durante varias horas y luego ahorcaron a un presunto asaltante. El secretario general del Gobierno de Oaxaca, Manuel García, explicó a Efe que los habitantes de esta comunidad impidieron que la policía municipal de San Blas Atempa, en la región del Istmo de Tehuahtepec frenara el linchamiento
El suceso ocurrió después de que Héctor Escobar, un lugareño, pidió apoyo a los vecinos para detener a un grupo de delincuentes que le habían robado varias alhajas. Su llamada fue secundada por unos dos centenares de comuneros que comenzaron una búsqueda organizada de los delincuentes y lograron capturar a Joel Gallegos. Después lo llevaron al Centro de Salud donde lo encerraron y golpearon para finalmente colgarlo.
Las autoridades comenzaron las investigaciones "para deslindar las responsabilidades del caso", aunque no informaron de cuántas personas participaron en el linchamiento y si existen detenidos.
En el 2005, los habitantes de Tierras Blancas quemaron vivo a un policía estatal por haber asesinado a un taxista de su comunidad. Y hace doce años quemaron a cuatro personas acusadas de haber asesinado a un médico con mucho prestigio en ese municipio.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 22 de enero de 2007