Una pelea entre dos bandas juveniles "rivales", integradas por inmigrantes ecuatorianos, acabó la noche del domingo con siete detenidos en la capital de Almería. Todo comenzó con un enfrentamiento verbal como consecuencia de un atropello ocurrido días atrás.
La pelea se inició por la mañana en el barrio de Pescadería. Por la noche, la trifulca se regeneró y acabó en batalla campal en la plaza de Altamira, donde se registraron daños en varios vehículos y pintadas en fachadas.
El tumulto, en el que participaron entre 25 y 30 personas, puso en alerta a los vecinos. La policía se incautó de navajas, piedras, dos candados de ciclomotor y bates de béisbol. Los agentes encontraron también varios bates de béisbol y botellas de cristal rotas en el interior de dos contenedores de las calles adyacentes donde ocurrieron los hechos.
Los detenidos, de entre 18 y 24 años, permanecían ayer en la Comisaría del Cuerpo Nacional de la Policía. Se les acusa de desórdenes públicos, resistencia y desobediencia a la autoridad. El alcalde, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, anunció que convocará la junta de seguridad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de enero de 2007