La telefónica alemana Deutsche Telekom ha reducido su pronóstico de beneficios debido a la dura competencia a la que se enfrenta en Alemania y a los tipos de cambio. La compañía asegura que tendrá que invertir más de lo esperado para mejorar sus negocios de banda ancha y telefonía móvil. Los beneficios antes de impuestos, intereses, depreciaciones y amortizaciones pasan de los 20.200 millones de euros previstos anteriormente a 19.000 millones, según anunció ayer en un comunicado.
El empeoramiento de las expectativas para 2007 incluye una reducción de 800 millones de euros en T-Com Alemania y de 200 millones de euros en T-Mobile Alemania. Los tipos de cambio representan una reducción de 200 millones de euros.
La compañía espera un aumento moderado en los ingresos del grupo para el año próximo. "El entorno sigue siendo difícil, pero sabemos qué hacer para mantener el negocio alemán bajo control no sólo en 2007, sino más adelante", subraya el texto.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 29 de enero de 2007