Las obras previstas para la construcción del tren de alta velocidad a su paso por el municipio pontevedrés de Vilaboa dejarán sin abastecimiento de agua al 80% del barrio de Paredes, donde se ubican más de 200 viviendas y varios hoteles. Así lo manifestó ayer el portavoz del Partido Popular en esta localidad, José Carlos Fernández.
Los populares advierten del fuerte impacto que estas obras y las del proyecto de mejora de la carretera N-554 tendrán sobre el municipio, por lo que instan a las autoridades a escuchar las propuestas de los usuarios antes de empezar los trabajos. "Estamos a favor del progreso pero no vamos a consentir ningún tipo de abuso", señaló.
El proyecto recoge la creación de dos túneles y un viaducto. Según Fernández, uno de los corredores, de 720 metros de longitud, tendrá una influencia "directa" sobre las viviendas. Afirmó que los técnicos le han comunicado que los pozos -en esa zona existen alrededor de un centenar- se secarán al menos entre 30 y 40 metros a ambos lados, y en el caso de que se utilicen explosivos el resultado será " imprevisible". Su propuesta es que el suministro, en un ayuntamiento en el que la falta de agua empieza a convertirse en un serio problema, se solucione antes de que comiencen las obras.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 30 de enero de 2007