El consejero de Política Territorial, Joaquim Nadal, aprobó ayer el plan especial urbanístico que permitirá la construcción de un centro penitenciario en el municipio de El Catllar, vecino de Tarragona. La nueva cárcel, cuyo objetivo es sustituir a la actual que se halla en el casco urbano, dispondrá de 500 celdas y una capacidad de 750 reclusos. La Generalitat prevé disponer en un mes y medio del proyecto ejecutivo de las obras, de manera que las obras puedan empezar en otoño de este año.
La prisión, bautizada con el nombre de Mas d'Enric, se erigirá en una zona de suelo no urbanizable justo en el límite territorial de El Catllar con Tarragona, cercana al casco urbano de El Catllar y en una superficie de 70,21 hectáreas. Estará rodeada de edificios anexos de servicios.
La Generalitat calcula que harán falta 375 puestos de trabajo para el normal funcionamiento de la prisión, cuyo perímetro -incluidos los edificios de servicios- estará rodeado de un muro de seis metros de altura. Política Territorial explicó ayer que el diseño de la prisión aprovechará al máximo la orografía del terreno para minimizar el impacto visual de los muros. La construcción de esta cárcel se enmarca dentro del plan de nuevas prisiones de la Generalitat, que también prevé centros en Sant Joan de Vilatorrada, Figueres y Tàrrega.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 9 de febrero de 2007