Representantes del Personal de Administración y Servicios (PAS) no funcionario de la Universidad de Vigo llevan 20 días encerrados en el Rectorado, cortando calles y boicoteando actos, después de dos años negociando sin éxito su convenio colectivo. Ayer fue un corte de más de una hora en la calle Torrecedeira, anteayer bloquearon el acceso al campus, hace diez días se plantaron en la investidura honoris causa de Lynn Margulis. El objetivo es llamar la atención sobre su problema, ya que la mesa negociadora no ha servido de nada hasta ahora.
Marcos Estévez, de CCOO, explica que la petición más importante para ellos es "la homologación salarial entre nosotros y los funcionarios de servicios", ya que la diferencia de ingresos es ahora mismo de entre 2.000 y 4.000 euros anuales.
La gota que colmó el vaso y que decidió a los sindicatos a convocar actos de boicoteo y a encerrarse en el campus fue la baja del gerente de la Universidad, Manuel Castro Oliva. "De golpe se va y no deja a nadie en su lugar en la mesa de negociación", lamentan. Desde ese momento, un grupo que se va rotando permanece encerrado en las instalaciones universitarias a modo de protesta, mientras otros compañeros se ocupan de cortar las calles e irrumpir en los actos oficiales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 9 de febrero de 2007