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El problema de la contaminación acústica

Una norma sin reglamento

El reglamento que desarrolla la Ley del Ruido, aprobada en 2003, se ha hecho esperar. Se aprobará con toda probabilidad en el Consejo de Ministros dentro de dos semanas, según fuentes del Ministerio de Medio Ambiente. Con esta normativa, los ayuntamientos tienen que diseñar un mapa de ruido con el que el municipio quedará dividido en áreas acústicas.

En función del uso principal del cada área (residencial, recreativo, industrial...), se asignarán unos valores máximos de ruido que, si se superan, la administración local tendrá que elaborar planes para reducirlos. Según la ley, los municipios de menos de 250.000 habitantes tienen cinco años para delimitar estas zonas; los mayores tienen que hacerlo antes de junio de 2007, según el borrador de reglamento. Algunas ciudades, como Zaragoza, ya lo tienen listo.

Además, el texto aún por aprobar dice que esos mapas de ruido podrán condicionar las futuras construcciones. Por ejemplo, en las zonas de máximo ruido sólo podrán ubicarse polígonos industriales, nunca viviendas u hospitales.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 9 de febrero de 2007