La Unión de Policía Municipal (UPM, 2.300 afiliados) solicitó ayer la dimisión del concejal de Seguridad, Pedro Calvo, tras el incendio el pasado viernes de la Unidad Integral de Vicálvaro. El sindicato, que protestó frente a las puertas del centro policial de San Blas inaugurado ayer, mantiene que las nuevas sedes no reúnen condiciones de habitabilidad y seguridad. Calvo (en primer plano, a la derecha) replicó que los edificios han recibido el visto bueno del comité de salud laboral del Ayuntamiento.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de febrero de 2007