El Instituto de Estudios Almerienses (IEA) y la Fundación Cajamar acaban de editar el Diccionario Biográfico de Almería, una obra en la que han participado 104 especialistas que han reseñado casi 650 entradas de personajes vinculados a la provincia. La obra recoge perfiles que van desde el siglo II hasta finales del siglo pasado. Todos los nombres incluidos son de personajes ya desaparecidos, condición indispensable para dotar a la obra de cierta metodología y rigor científico. Sólo la publicación del Padre Tapia Almería, hombre a hombre, existía de referencia, si bien su reducido contenido dejaba el trabajo en mera guía.
El equipo editorial, con el coordinador Julián Pablo Díaz, incluyó en este diccionario a personas que, aunque no nacidas en Almería, hubieran residido de manera permanente en la provincia con unos méritos similares a los perfiles almerienses elegidos. El diccionario también recoge a personas que, tras su nacimiento en la provincia, desarrollaron la totalidad de su obra prácticamente fuera de sus fronteras.
El director del IEA, Valeriano Sánchez, explica que la idea de "ver la historia de Almería" con nombre propio surgió como emulación de lo que se viene haciendo en otros países europeos desde hace siglos. "Alemanes, italianos y británicos llevan siglos de ventaja. El ejemplo más claro está en la Enciclopedia Británica. La historia se puede ver desde una forma social de grupos que transforman su entorno y también a partir de pistas con nombres propios. En España, la Real Academia de la Historia lleva empleada una década en la confección de un diccionario biográfico similar al de Almería", dice el director del IEA.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 16 de febrero de 2007