A pesar de una excesiva tendencia al cliché, de una realización un tanto desastrada y de una vulgar utilización del subrayado musical, la película italiana Manuale d'amore consiguió hace dos años un gran éxito de público en su país gracias a su cercanía y a una cierta simpatía que la elevaban por encima de sus defectos. El triunfo, gracias al boca a boca, se repitió en España el pasado año, donde la cinta se mantuvo durante meses en una sala madrileña. De modo que en tiempos de maximización de recursos, no es de extrañar que sus productores se hayan dado prisa en repetir fórmula con una nueva colección de cortos (independientes entre sí) en torno al amor.
Las imperfecciones antes apuntadas se acentúan en Manuale d'amore 2, que abusa aún más de la enfatización musical a través de múltiples canciones, que si no son de Laura Pausini al menos lo parecen. Por otro lado, la irregularidad se adueña del conjunto y sus cuatro historias se podrían dividir entre la colección de tópicos del corto erótico del parapléjico y la fisioterapeuta (nada menos que Monica Bellucci); la cordialidad de las piezas sobre la inseminación artificial y el matrimonio homosexual, y el desastroso dibujo de personajes de la trama del adulterio.
MANUALE D'AMORE 2
Dirección: Giovanni Veronesi. Intérpretes: Riccardo Scamarcio, Monica Bellucci, Elsa Pataky, Barbora Bobulova. Género: comedia. Italia, 2007. Duración: 116 minutos.
Aunque lo que más llama la atención en la película es la visión de España como paraíso de las libertades que tienen sus autores, que ambientan buena parte de dos de sus historias en Barcelona, donde no sólo se puede casar una pareja gay, sino también tratar de tener un hijo una pareja heterosexual sin las restricciones legales sobre reproducción asistida.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 16 de febrero de 2007