El Senado aprobó ayer, por unanimidad, pedir al Gobierno que regule los intermediarios financieros y reunificadores de deudas. Estas empresas ahora sólo están sometidas a las normas generales de consumo, pero carecen de registros públicos, de supervisión y de control específico sobre la veracidad de la publicidad.
La moción fue propuesta por el PP, que aceptó las enmiendas de PSOE y CiU. El portavoz de Economía del PP, Javier Sánchez- Simón, alertó de que el vacío legal que afecta a estas empresas "permite ofertas de créditos en 24 horas con tipos de interés y comisiones que pueden superar el 25%, amparados en prácticas comerciales y publicitarias engañosas". El senador pidió que se evitaran los casos de usura. La proliferación de este negocio se debe al incremento hipotecario, del consumo y de los tipos de interés. El Senado llamó la atención sobre los reunificadores de deudas que, en ocasiones, en lugar de suponer un ahorro para los clientes, incrementan sus obligaciones.
Ahora el Gobierno tiene seis meses para cumplir la moción aprobada en el Senado. El PP, que recordó que la UE prepara una directiva sobre el asunto, recordó que esta normativa está transferida a las autonomías, si bien algunas de ellas, como Euskadi y Cataluña, han pedido que lo regule el Banco de España.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 21 de febrero de 2007