El fabricante de móviles BenQ Mobile, filial germana del consorcio tecnológico taiwanés BenQ, será finalmente liquidado tras no hallarse ningún inversor dispuesto a hacerse con la compañía, según confirmó ayer una portavoz del gestor de la insolvencia, Martin Prager. En enero pasado, el fabricante suspendió la producción en Alemania, cuatro meses después de que la casa matriz declarase insolvente esta división.
La compañía Siemens había traspasado a BenQ su división de teléfonos móviles a mediados de 2005, para lo que pagó 413 millones de euros, y a finales de septiembre de 2006, el grupo taiwanés presentó una solicitud de insolvencia para esta filial con 3.000 empleados. Con la liquidación de la compañía se eliminarán prácticamente la totalidad de los 3.000 puestos de trabajo, pues hasta ahora Siemens sólo ha ocupado a dos centenares de trabajadores en otras divisiones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 25 de febrero de 2007